La popularidad del tatuaje no es algo que hoy tengamos que demostrar. Un reciente estudio revela que el 14% de las mujeres con más de 18 años se dejan tatuar la piel. Pero también puede ocurrir que queramos camuflar estos tatuajes. El maquillaje representa una buena opción. Veamos ahora cuáles son las etapas fundamentales que debemos seguir.

Preparar la piel

Antes de querer esconder el tatuaje, es importante garantizar que la cicatrización se haya realizado correctamente. En caso contrario, no solamente corremos el riesgo de que la crema no quede fijada, sino que además, los componentes del producto puedan reaccionar con la herida, y crear infecciones. Si tenemos la certeza de que la piel ha cicatrizado bien a nivel del tatuaje, debemos limpiarla con una toallita húmeda y después pasar a la etapa siguiente.

La etapa de la limpieza es fundamental, puesto que además ayuda a preparar la piel para la aplicación del maquillaje. Recordemos que es preferible no cubrir el tatuaje si no ha cicatrizado completamente, puesto que se corre el riesgo de dañar la tinta y desarrollar una infección. Algunos tatuajes tardan hasta 45 días en cicatrizar completamente.

Espalda tatuada

Aplicar productos de maquillaje

Existen varios tipos de productos que ayudan a camuflar el tatuaje en ciertas ocasiones especiales, por ejemplo si no queremos mostrar la piel marcada, o a la hora de una entrevista de trabajo donde están prohibidos los tatuajes visibles. La primera etapa es usar un corrector para cubrirlo completamente. Debemos escoger un color más claro que la piel, y lo ideal es que sea un producto líquido. Se extiende a base de golpecitos, o con ayuda de un pincel o una esponja de maquillaje para extenderlo correctamente, sin gastar demasiado producto.

El segundo producto que debemos aplicar, si queremos cubrir el tatuaje, es la crema base. Contrariamente al corrector, esta es prácticamente uniforme con el color de la piel. Si utilizamos un vaporizador, una vez agitado el frasco, se coloca a unos 15 cm aproximadamente del tatuaje y se vaporiza poco a poco. Una vez cubierto todo el tatuaje, conviene esperar unos 60 segundos hasta que se seque. Si utilizamos una crema base líquida, el pincel o la esponja ayudarán a extender correctamente el producto por encima del corrector, también a base de golpecitos.

Después de la crema base, conviene añadir polvo maquillador para esconder el tatuaje convenientemente. El polvo que se utiliza debe ser transparente. Se debe aplicar sobre la crema base con ayuda de un pincel ancho. El objetivo es crear una fina capa mate sobre la piel.

Fijar el maquillaje

Para evitar que el maquillaje se vaya con el roce de la ropa, y también que esta se manche, o que chorree por culpa de la sudoración, debemos utilizar laca para fijarlo. Una vez que se ha camuflado completamente el tatuaje con el maquillaje, debemos vaporizar la laca por encima. El tiempo de espera debe ser el suficiente para garantizar que el maquillaje que camufla esté bien seco.

Productos especiales

Si no queremos pasar demasiado tiempo camuflando el tatuaje, se pueden utilizar productos especialmente concebidos para esta función. En el mercado los podemos encontrar de varios tonos para que se adapten a las diferentes tonalidades de la piel. Ciertamente, este tipo de productos de maquillaje para camuflar tatuajes son de gran eficacia.