La depilación de la zona íntima, a nivel del pubis, de los labios mayores y de toda la zona sexual, es algo que cada día las mujeres realizan con más frecuencia. Sin embargo, lejos de ser algo «higiénico», como piensan algunas mujeres (y hombres), la depilación íntima aumenta ciertos problemas íntimos.

Depilación definitiva, una agresión para la vulva

La depilación arranca el vello de su raíz. La depilación definitiva quema el bulbo del pelo, impidiendo definitivamente (o casi) que vuelva a salir. El problema es que la depilación no arranca únicamente el pelo. También arranca o destruye la glándula sebácea a la que está sujeta.

La glándula sebácea

Las glándulas sebáceas producen el sebo, una substancia lipídica formada por grasas destinadas a proteger la piel. Efectivamente, la piel, para que esté suave debe estar húmeda. Esta humedad proviene de la parte interna de los tejidos. Sube a la superficie, y se evaporaría instantáneamente si no fuera retenida por una barrera formada por el sebo.

Las glándulas sebáceas producen un film que permite conservar la piel suave alrededor de los labios menores.

El mecanismo

De pronto, sin glándulas sebáceas, a la piel depilada le falta el fluido protector. El agua que remonta hacia la superficie se evapora con rapidez, y la piel se vuelve seca e irritable, y por lo tanto se debilita.

Las mujeres que se hacen una depilación integral, presentan ciertos problemas específicos. Su vulva es más frágil, y más irritable. Puede escocer en contacto con la ropa interior, o los protege slips.

Sin embargo, la vulva es una zona natural preparada para el frotamiento, aunque sólo sea a la hora de andar. También puede volverse más sensible a la micosis y a las infecciones de la vulva, puesto que por contigüidad, la mucosa está menos protegida.

De ahí que muchos ginecólogos desaconsejen la depilación definitiva de la vulva. Una vez que se ha realizado, ya no es posible volver hacia atrás. Y si el malestar de la vulva se hace permanente, no queda otra solución que soportarlo con paciencia.