La cirugía estética o también llamada plástica es una especialidad quirúrgica que se ocupa de la forma y de la función del cuerpo. Tocando casi todas las zonas anatómicas, salvo la parte interior del cráneo, del tórax, y del abdomen, sus campos de acción son enormes.

Sus grandes campos de actividad son: cirugía de la mano, cirugía craneofacial, cirugía de quemados, cirugía reconstructiva, y cirugía plástica pediátrica, etc. Para someterse a un tipo de operación de este calado, la confianza es de rigor entre la paciente y el cirujano. Escucha, comprensión y solución son las claves del éxito.

Los tiempos modernos exigen a las mujeres que sean polivalentes, encarnadas en el mundo laboral y de la responsabilidad, deportistas, determinadas, y también amantes, glamurosas, y madres de familia. Por lo tanto, la cuestión estética es un criterio importante para la mujer de hoy en día, que sabe elegir lo que quiere y aquello de lo que tiene necesidad.

Cirugía del vientre

La abdominoplastia es una intervención propuesta a las pacientes cuyo abdomen ha sufrido una deformación después el embarazo, o un relajamiento espontáneo del abdomen, para poder corregir las deformaciones, puesto que un régimen o una Mujer de espaldasreeducación bien llevadas son insuficientes para recuperar un aspecto más juvenil.

El procedimiento consiste en volver a recuperar la tensión de la zona muscular abdominal y de la piel abdominal; eliminar la grasa de todo el abdomen, gracias a una lipoaspiración. El ombligo se conserva y es situado en su posición original.

La liposucción

La liposucción consiste en aspirar las células grasas, o también llamadas adiposas, de ciertas zonas del cuerpo: caderas, abdomen, brazos, cuellos y con mayor frecuencia de los muslos y las rodillas. Se requiere normalmente anestesia local o general.

El cirujano introduce, por pequeñas incisiones, unas cánulas blandas, con la punta redonda, con varios puntos de succión. Estas cánulas van conectadas a un circuito cerrado en el que se crea un depresión negativa. La lipoaspiración no sustituye una higiene de vida correcta, ni un régimen, ni la práctica de ejercicio físico.