Como todas sabemos, la celulitis es la formación de cúmulos de células grasas que se localizan en ciertos lugares específicos de nuestro cuerpo: la parte inferior del vientre, las cartucheras, los brazos, los muslos, las rodillas… Es la celulitis la que confiere a la piel el aspecto de piel de naranja, y que no es nada estético, especialmente en verano, cuando llega el momento de descubrirse algo más.

La electrolipólisis, una cirugía estética suave

La cirugía estética propone una solución alternativa suave para combatir la celulitis: se trata de la electrolipólisis. Esta técnica se basa en la destrucción de los cúmulos de grasa por emisión de una corriente eléctrica de débil intensidad y de baja frecuencia.

El sistema funciona de la siguiente manera: se implanta agujas muy finas sobre las zonas que se deben tratar, y se crea un campo eléctrico gracias a estas agujas. Los cúmulos de células grasas se disuelven, la calorías liberadas se queman después por Electrolipólisismedio de la electrolisis. Y la verdad es que funciona.

Un resultado inmediato

El resultado inmediato es la reducción del volumen de cúmulos de grasa, la piel recupera su firmeza. Dicho de otra forma, la electrolipólisis está recomendada para aquellas mujeres que presentan una celulitis superficial, no muy profunda. La celulitis más profunda requiere otro tipo de técnica más puntera, y no se puede tratar eficazmente con la electrolipólisis.

La electrolipólisis es indolora

No es un tratamiento doloroso, esto es lo que constituye la principal ventaja de esta técnica tan específica. Esta técnica no es traumática, ni deja ningún tipo de equimosis, ni de cicatriz, ni de edema en la piel, una vez que la sesión se ha terminado. Las agujas son tan finas como las que se utilizan en acupuntura, por lo tanto no causan ningún tipo de dolor. Además, estas agujas sólo se utilizan una vez, porque luego se tiran: por lo tanto no se corre ningún tipo de riesgo de infección.