• Autor de la entrada:
  • Tiempo de lectura:4 minutos de lectura

El método alcalino o régimen ácido básico es muy beneficioso porque ayuda al organismo a funcionar de forma mucho más adecuada. En realidad es importante para todo el mundo, pero conviene saber que en los deportistas, el equilibrio ácido básico es un plus que no conviene despreciar.

Equilibrio ácido básico para unos huesos sólidos

Frente a la acidez, el organismo establece diferentes procesos de corrección o de compensación. Uno de estos sistemas consiste en sacar las reservas de los elementos básicos. Para neutralizar este exceso de ácido, el cuerpo moviliza citrato y bicarbonato óseo. Como están relacionados con el calcio, este se elimina por la orina y por tanto será un déficit para el esqueleto.

Cuando la cuestión perdura, este proceso puede provocar una desmineralización del hueso, que se vuelve más frágil y por tanto más expuesto a los riesgos de una fractura, sobre todo si se practica un deporte violento. Unos huesos sólidos son garantes de una mejor función muscular, puesto que los músculos están unidos a los huesos.

Ácido-base

El régimen ácido básico para proteger los riñones

La práctica deportiva, sobre todo cuando es intensiva, solicita los riñones. Los riñones son los órganos de la eliminación, y deben trabajar más todavía para eliminar los residuos generados durante y después del esfuerzo físico.

Por otro lado, puesto que hablar de proteínas es hablar de músculo, el deportista suele adoptar un régimen rico en proteínas, sin embargo, el metabolismo de las proteínas solicita también mucho trabajo por parte de los riñones. Además, suelen ser proteínas animales, muy ácidas, que favorecen la acidificación del organismo, por tanto si decimos acidosis decimos aumento del riesgo de cálculos renales.

Método alcalino para preservar los músculos

Para neutralizar la acidosis, el cuerpo puede sacar la energía de la masa muscular para utilizar la glutamina, uno de los 20 aminoácidos, esos ladrillos que componen las proteínas. Al ligarse a los iones de hidrógeno, esta glutamina serve de tapón frente a la acidez. El problema es que a la larga, este fenómeno puede provocar una degradación de las proteínas musculares y por tanto una pérdida de masa muscular. Por el contrario, ciertos estudios han demostrado que un régimen alcalino permite un mayor aumento de la masa muscular.

Evitar las lesiones y dolores

Tendinitis, calambres frecuentes, dolores musculares, todos estos son problemas que suelen padecer los deportistas. Lo más probable es que tengan que ver con el equilibrio ácido base. Las cargas ácidas que no se eliminan se pueden acumular en los tejidos conjuntivos blandos. Concretamente nos referimos a los tendones, alterando su buena oxigenación. Estos suelen provocar dolores durante el entrenamiento, riesgo creciente de patologías osteotendinosas, como son las tendinitis.

Mejores rendimientos

El pH de nuestro organismo está regulado de forma muy precisa para favorecer un funcionamiento óptimo del cuerpo. En presencia de una acidosis metabólica, el ácido se instala en todos los tejidos. Las células no funcionan correctamente y quedan menos oxigenadas. El rendimiento energético a nivel celular es menos eficaz. El resultado final es que los rendimientos son peores en cada sesión deportiva, y experimentamos cierta dificultad en la recuperación, o entrenamos con cierta fatiga crónica.

Deporte intenso y equilibrio ácido base

Una práctica deportiva intensa puede desajustar el equilibrio ácido base. Durante el esfuerzo, el músculo consume grasas o azúcares que se queman por el oxígeno, provocando la producción de residuos. En otras palabras, hablamos de ácido láctico, si el azúcar se quema con un aporte insuficiente de oxígeno.

El riesgo está en acumular este ácido láctico, contribuyendo a una acidosis. No obstante, el entrenamiento correcto permite desarrollar la capacidad respiratoria, y por tanto favorecer la evacuación de los iones H+, que son los marcadores de la acidez.