Un principio determinante en el mundo del maquillaje es el siguiente: cuanto más natural, mejor es el resultado. Esto no quiere decir que no haya cosas que corregir a través del maquillaje, sino al contrario, puesto que un maquillaje natural debe trabajarse con mucho cuidado, y requiere ciertas técnicas y cosméticos adaptados. El tipo de maquillaje más favorecedor para una mujer es aquel que no se nota.

Consejos para un tono de piel perfecto

Como cuestión básica, conviene saber que un maquillaje exitoso se efectúa sobre una piel limpia, hidratada y sin imperfecciones. Tras aplicar la crema para el rostro, o la crema hidratante, se aplica el corrector base, con ayuda de una esponja, sobre las imperfecciones de la cara (granitos, irritaciones). Después, se puede aplicar un fondo, cuyo color sea lo más parecido al tono de piel de vuestra cara.

brocha de maquillajeÉste se debe aplicar con ayuda de una esponja triangular, para acceder fácilmente a todas las partes de la cara, incluidas las aletas de la nariz y los párpados. Estirad bien la piel con la esponja del interior hacia el exterior del rostro, sin olvidar el cuello para obtener un tono transparente sin marcas. Fijar después, con polvos para un acabado óptimo. Se puede pasar la brocha en función de la forma de la cara, para realzar los pómulos y aparentar un aspecto saludable.

Consejos para los ojos y la boca

Tras haber depilado y peinado las cejas, trazar una línea a lo largo de las pestañas, sobre los dos tercios exteriores de vuestros párpados, con un lápiz khôl marrón, más natural que el lápiz negro. Para mayor facilidad, utilizar un lápiz graso, que marca fácilmente.

A continuación aplicar una sombra de ojos marrón suave, extendiéndola sobre el tercio externo del ojo, remontando hacia el hueco del párpado. Para agrandar el ojo, añadir un toque de sombra más clara debajo de la punta de la ceja. Para una mirada intensa, añadir dos capas de máscara.

Para la boca, destacar el contorno exterior de los labios con un lápiz claro. Esto evitará que el carmín se introduzca por las arruguitas, y ofrecerá volumen a la boca. Trazad algunas rayas, esta vez en el interior, con un lápiz del tono de vuestros labios, y luego aplicar un gloss transparente o de color.