En el asunto de pilosidad, no todo el mundo es igual. La madre naturaleza ha sido, por desgracia, más generosa con ciertas personas que con otras. Cada centímetro cuadrado del cuerpo se ausculta meticulosamente. El menor vello descubierto es eliminado.

La cuchilla

Un poco de gel o de espuma especial para afeitar y una cuchilla y ya podemos empezar. En dos minutos solamente, la cuchilla, con su cabeza basculante, corta los vellos de las piernas, de las axilas sin el menor esfuerzo.

Los inconvenientes: Las piernas enseguida vuelven a poblarse de vellos, y estos cada vez que salen son más duros y oscuros, los vellos crecen a mayor velocidad.

La crema depilatoria

Fácil de usar, la crema depilatoria elimina los vellos largos o cortos en pocos minutos. Basta con extender la crema depilatoria sobre la zona que se va a depilar. Se deja actuar en función del tiempo indicado en el prospecto. Después, se retira la crema con ayuda de una espátula o frotando con una esponja.

DepilaciónEn la primera utilización, se impone realizar previamente un test cutáneo. Se aconseja comprobar que la piel no sufre ningún tipo de reacción alérgica. Lo ideal es aplicar un poco de crema sobre el codo, en la zona del pliegue.

Los inconvenientes: Esta fórmula química está dirigida en particular a las mujeres con más vello. Además, no se puede aplicar en todas las partes del cuerpo, como las zonas íntimas o las zonas irritadas.

La cera

La cera es sin lugar a dudas la solución más eficaz. A base de resina o de cera de abeja, ofrece tres semanas de tranquilidad y limita la formación de vello enconados. Caliente, fría o templada, la cera se adapta a todos los gustos. Caliente agarra mejor el vello, puesto que con el efecto del calor, los poros de la piel se dilatan. En cualquier caso hay que tener cuidado con las quemaduras.