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El cine es uno de los mejores planes de ocio. Un plan perfecto para compartir en familia. ¿Cuáles son las ventajas de disfrutar de este plan con tus seres queridos?

1. Sesiones de cine durante todo el año

La cartelera se actualiza cada viernes con las novedades de las propuestas cinematográficas de la semana. Este factor sorpresa es un aliciente para estrenar el fin de semana con la perspectiva de la ilusión. Puedes acompañar el paso de las estaciones con ese hábito de ver buenas películas.

2. Una tradición familiar

Cada familia tiene sus propias costumbres y tradiciones. Planes que generan un arraigo común de pertenencia. Por ejemplo, ir al cine durante el sábado por la tarde puede ser una de esas bonitas costumbres de felicidad.

Compartir tiempo en familia es una necesidad vital para fortalecer el vínculo y generar un arraigo en común. Estos hábitos y rutinas ayudan a crear una agenda de ocio interesante.

Siete ventajas de ir al cine en familia

3. Mejorar la comunicación

El diálogo y la reflexión es uno de los mejores antídotos para propiciar lazos saludables en familia. El diálogo es necesario para solucionar las diferencias, potenciar la empatía y propiciar el conocimiento mutuo.

Al ir al cine en familia también estás desarrollando tus propias habilidades comunicativas. Por ejemplo, tenéis que negociar qué película veréis la próxima semana, o también, podéis comentarla después a modo de tertulia.

4. Flexibilidad mental

Cada persona observar la realidad desde su propio punto de vista. Sin embargo, ir al cine es tan educativo como viajar. Por medio de las historias de la gran pantalla puedes ampliar tu zona de confort y fomentar la flexibilidad mental al obtener aprendizajes vitales a partir de las tramas protagonizadas por los personajes.

5. Recuerdos en común

Los recuerdos familiares no solo están perfectamente editados en un álbum fotográfico. Los mejores recuerdos son aquellos que han quedado grabados en el corazón de los protagonistas. Algunas películas familiares, trascienden a la ley del paso del tiempo, dejando anécdotas, emociones y vivencias.

Esos recuerdos en común harán que cada vez que vuelvas a ver una de esas películas, tu mente viaje hacia el pasado a partir de la emoción de una dulce nostalgia.

6. Cultura

La cultura es un alimento de la mente y del corazón. Gracias al hábito de acudir con frecuencia al cine para ver una película en familia, aumenta tu conocimiento sobre el séptimo arte: géneros, actores de moda, intérpretes de prestigio, jóvenes talentos, grandes directores, festivales y premios cinematográficos, bandas sonoras y eventos especiales como la fiesta del cine.

7. Celebrar el Día del Espectador

Los planes familiares pueden ir más allá del sábado o el domingo. Por ejemplo, puedes comprar entradas en el Día del Espectador, día que se celebra entre semana, propiciando el ahorro de comprar la entrada por un coste más económico.

Desde esta perspectiva, una sesión de cine es un plan de motivación laboral, un premio al esfuerzo realizado en la oficina. La felicidad conecta con experiencias emocionales. Y el cine es un constante viaje de creatividad.

Foto – Pixabay