Muchas personas piensan que deben cambiar completamente su régimen alimenticio y realizar mucho más ejercicio para eliminar la grasa abdominal. Esto es en parte cierto, pero lo que no se sabe, es que existe un medio mucho más fácil para eliminar los michelines y la grasa acumulada.

Sin embargo, no debemos olvidar que la combustión de grasas es un proceso lento y que requiere tiempo. Por tanto, debemos ser pacientes y constantes en la realización de los ejercicios.

Estas son las diferentes etapas que debemos seguir para desprendernos de la grasa abdominal:

Dejar de comer alimentos malsanos y ricos en calorías

Debemos dejar de lado todos los alimentos ricos en azúcares, en materias grasas y en calorías que tenemos en la cocina. Los snacks y la repostería son alimentos con bajo valor nutritivo y gran aporte calórico. Al consumirlos, no conseguimos adelgazar, incluso si practicamos una actividad física.

Grasa abdominal

Beber mucha agua

Normalmente debemos beber entre 8 y 10 vasos de agua al día, lo que equivale a un litro y medio aproximadamente. Mantener el cuerpo hidratado es muy importante para su correcto funcionamiento, además ayuda a eliminar de forma eficaz las toxinas a través de la transpiración y de la orina. Además, una buena hidratación previene el fenómeno de la retención de líquidos.

Comer alimentos ricos en fibras

En un régimen sano debemos integrar al máximo alimentos ricos en fibras. Semillas, verduras, legumbres, nueces, etcétera ofrecen una sensación estable de saciedad, mejoran la digestión y ayudan a prevenir los problemas digestivos como la hinchazón y la flatulencia, sin dejar de lado los beneficios en el sistema cardiovascular.

Practicar ejercicio con frecuencia

Si deseamos acelerar el metabolismo de combustión de grasas, debemos practicar una actividad física durante 30 a 45 minutos al día. En función de las preferencias personales, podemos optar por caminar, hacer aerobic, baile, natación, o running. Cuando se practica este tipo de deporte de forma frecuente empezamos a quemar calorías y a perder grasa acumulada en el cuerpo, al tiempo que se reduce el estrés y obtenemos una sensación de bienestar general.

Reforzar el cuerpo

Sabiendo que cuando se refuerzan los músculos el organismo consigue desprenderse con mayor facilidad de las grasas, podemos practicar yoga o pilates, puesto que solicitan todos los músculos del cuerpo. Estas actividades son tonificantes y relajantes, pero también son suaves y ayudan a reforzar el cuerpo, a ganar en flexibilidad y a afinar sin demasiado esfuerzo la silueta. De esta forma perdemos peso con mayor rapidez y recuperamos una silueta armoniosa y esculpida.

No debemos olvidar que la pérdida de grasa abdominal no es algo fácil. Este proceso requiere buena voluntad, frecuencia y resistencia. Cuanto más practicamos, más rápido se verán los resultados

Aumentar el metabolismo en el desayuno

El desayuno es una etapa importante que no conviene dejar de lado, incluso si el objetivo es el de perder peso. Este permite mantener la tasa de colesterol, y la de insulina. La mejor solución es tomar el desayuno a la misma hora todos los días para habituar al metabolismo. Pero en caso de levantarnos más tarde, no olvidéis hacer un buen desayuno una vez despiertos.

Siempre debemos priorizar los alimentos ricos en proteínas y en fibras, tales como los cereales integrales o los copos de avena.

La calidad del sueño

Por otro lado, es muy importante relajarse bien durmiendo lo suficiente. Una persona adulta necesita un sueño de 7 horas como mínimo. También debemos tomar el tiempo suficiente para descansar a lo largo del día, aunque solo sean 15 minutos. Una siesta tendrá un efecto reparador y reactivará el metabolismo.

Por último, la postura corporal juega un papel importante en la apariencia física. Por esta razón debemos estar siempre rectos y pensar en contraer los abdominales para evitar su relajamiento. De esta forma veremos en poco tiempo cómo el vientre parece mucho más plano.