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Lady Gaga crea espectáculos y escándalos allá donde vaya. Esto es un hecho, una verdad tan cierta como que esta artista ha sabido crear alrededor de ella misma una figura que millones de personas, alrededor del mundo entero, adoran y veneran.

Hemos tenido la suerte de disfrutar de sus conciertos la semana pasada, en la ciudad de Barcelona y Madrid, siendo acontecimientos tan importante que rozaban la locura de algunos de sus fans que días antes dormían delante de los recintos donde se iba a celebrar los conciertos para ser los primeros.

Lady gagaSin embargo, el día del concierto, en Madrid, algo ocurría fuera de ese recinto. Mientras dentro nuestra diva de la música se comía y enamoraba al público con su show, fuera, decenas de little monsters (tal y como se denominan ellos mismos), se perdían el espectáculo de su ídolo, de su diosa particular.  Cuándo a media tarde la noticia de que alguien se había dedicado a vender entradas falsas por Internet, la indignación empezó a recorrer los rostros de los asistentes.

El público estafado no sólo perdió entre 57 y 96 euros de la entrada, sino que tuvieron que regresar a casa sin poder asistir al evento de año, al que algunos habían tenido que asistir de ciudades de origen lejanas.  Según las cifras de la policía, fueron unas 200 personas las afectadas, aunque este número era aproximado.

Por lo que respecta al concierto, los que sí tuvieron suerte de no perderse el tan esperado acontecimiento, pudieron disfrutar de las excentricidades de Lady Gaga que cambió de vestuario una docena de veces gritando con orgullo «Viva los freaks».

Mientras dentro la música paraba el aliento de todos los gaga fans, fuera, el griterío de los gaga fans indignados se quejaban de la mala organización y de las malas formas con las que se les había dejado fuera.