Suele ser bastante frecuente engordar entre 2 y 3 kg durante las fiestas de navidad. Algunos estudios se atreven a concluir que de media engordamos 877 gramos durante las fiestas. Normalmente, las comidas navideñas nos llevan a comer en exceso. Ciertamente no es el mejor periodo del año para someterse a un régimen alimenticio. Evidentemente, durante la navidad no vamos a conseguir perder peso, pero sí podemos evitar subir de peso.

Practicar una actividad física

No existen secretos, para evitar engordar durante la navidad, pero igualmente durante el resto del año: debemos practicar una actividad física. No se trata de acudir a un gimnasio, o de realizar una hora de caminata diaria. El periodo de navidad suele ser la ocasión de tomarse algunos días de vacaciones, y conviene disfrutar de ellos. Un paseo en solitario o en familia es muy beneficioso. Algunas personas incluso se atreven a moverse a marcha rápida: esto es lo que nos permite estabilizar el peso corporal.

Hidratarse bien

La ecuación es bien sencilla, cuanto más se bebe, más se elimina. Debemos por tanto llevar siempre encima una botella de agua para poder conseguir beber un litro y medio al día. Bien es verdad que esta norma también es válida durante el resto del año, pero en navidad es el periodo del año en el que el cuerpo necesita eliminar todas las toxinas almacenadas durante las cenas y comidas de las fiestas.

Cena copiosa

Evitar los aperitivos

Normalmente a la hora del aperitivo ingerimos auténticas bombas calóricas. Durante la cena de navidad o de fin de año, solemos comer canapés con demasiada grasa, y mucha sal. En su lugar debemos dejarnos tentar por pequeñas verduras en miniatura que se pueden mojar en queso blanco, ya que es menos calórico que la mayonesa y mucho más sano. Estas salsas se pueden condimentar igualmente con hierbas aromáticas y especias.

Las bebidas alcohólicas

Podemos beber alcohol como champán o sidra, que son las que menos calorías tienen. Pero por el contrario, debemos evitar los alcoholes fuertes como el whisky o el vodka que contienen más de 200 kilocalorías por vaso. Si queremos ir todavía más lejos, podemos servirnos una copa de champán en el momento del aperitivo, y luego limitarnos a dos copas de vino durante la comida.

Comer antes de la cena

La cena de navidad es parecido a lo que ocurre cuando vamos de compras. Si tenemos el estómago vacío, tenemos tendencia a comer todo lo que se nos presenta, y a ingerir cualquier cosa, lo que nos predispone a engordar más de la cuenta. Pero por ejemplo, un yogur o una fruta dos horas antes de la comida, permiten limitar la ingesta de otros alimentos en la cena.

Servirse una sola vez

Las comidas de la navidad son la ocasión perfecta para comer platos exquisitos: paté de foie, salmón ahumado, caviar, capón. El problema es que nos dejamos tentar por lo que vemos, y terminamos por servirnos varias veces. Para evitar engordar durante las fiestas de navidad, no se debe repetir del mismo plato. En cuanto al primer plato, debe ser suficiente, pero razonable.

Comer lentamente

Tenemos que dejar al cerebro el tiempo suficiente para registrar que el estómago ha dejado de tener hambre, unos 20 minutos de media. Para ello debemos masticar bien y comer suavemente. Esta regla no solamente se debe aplicar durante las cenas de navidad. El hecho de comer lentamente nos permite una mejor digestión.

No al postre dulce

Como la sal facilita la retención de agua, el azúcar facilita el aumento de peso, almacenando las células grasas. Si no queremos echar a perder los esfuerzos realizados hasta el momento, debemos optar por un postre sano, como una macedonia de frutas o una clementina.

No saltarse las comidas

Tras una comida de navidad copiosa, tenemos tendencia a no comer nada al día siguiente, pero esto no es una buena idea. Si nos saltamos una comida, todo lo que ganamos es tener más hambre al día siguiente. Por eso debemos comer poco, por ejemplo solo una sopa, pero comer algo en todo caso.