Cada vez son más las mujeres que sufren por culpa de los desarreglos menstruales. Comer alimentos adaptados y moderar el consumo de otros puede ayudar a aliviar los síntomas de una fuerte indisposición.

¿Cómo se puede hacer frente y limitar los efectos de los cambios hormonales conocidos con el nombre de «síndrome premenstrual»? Las soluciones consisten concretamente en seguir una alimentación equilibrada y adaptada con el fin de establecer un cierto equilibrio psicológico, incluso durante la menstruación.

Los alimentos que se deben evitar

Los desarreglos relacionados con las reglas se producen mensualmente y agrupan los siguientes tres elementos:

  • Un desequilibrio químico cerebral,
  • Un cambio hormonal importante,
  • Una carencia nutritiva creciente.

Por eso se recomienda evitar toda comida que pueda favorecer de una u otra manera estos factores, con el fin de prever la aparición de las reglas dolorosas, las crisis de angustia y los estados de cansancio o de estrés durante los ciclos de menstruación.

Los platos salados

Consumar sal es esencial para una buena alimentación, en cualquier caso, un exceso contribuye a la aparición de hinchazón, de una retención de líquidos así como una sensibilidad mamaria. Los nutricionistas recomiendan no superar la cantidad de 2 300 mg/día (es decir una cucharada de café).

Dieta sanaTambién conviene evitar las comidas muy saladas que se preparan en casa o aquellas que ya viene preparadas de manera industrial (un solo plato precocinado contiene normalmente de 3 a 4 veces más sal que lo que se debería comer a diario).

Las pizzas, las lasañas, las charcuterías, los pescados ahumados, las patatas chips, las salsa comerciales, los marinados, los tomates en conserva, los pepinillos, los quesos… entran en la lista de alimentos que se deben moderar en su consumo, o incluso excluir del menú por su alto contenido en sal. Pero lo mismo ocurre con las aguas minerales ricas en sodio, así como las preparaciones con levadura química.

Las bebidas como el café

Estas bebidas se deben moderar durante la menstruación, puesto que como el alcohol actúan sobre el estado psicológico y sentimental de la consumidora y provocan así una eliminación de magnesio.

Además, reducir el consumo de cafeína puede ayudar a disminuir la hinchazón y calmar un estómago irritado. La cafeína puede efectivamente aumentar la acidez gástrica, y dañar a unos intestinos sensibles. Un buen sustitutivo del café (con un rico sabor) es el tchai tradicional (té indio).

Además, la cafeína estrecha los vasos sanguíneos y deshidrata el organismo, lo que puede provocar un dolor de cabeza y aumentar el nerviosismo durante los desarreglos propios de las reglas.

En definitiva, una dieta equilibrada y sana es ideal para mantener no sólo la línea durante la fase fértil de la mujer, sino también para calmar y aliviar los síntomas provocados por la menstruación. Evitar ciertos alimentos es una opción necesaria y recomendable para toda mujer que sufre con cierto dolor y angustia el período regenerador del útero.