El síntoma de las piernas cansadas es algo incómodo, antiestético, y sobre todo, doloroso. Veamos una serie de consejos para aliviar las piernas cansadas, especialmente en determinadas épocas del año, como son las estaciones de mayor calor.

El calor

La sensación de piernas cansadas se debe normalmente a una mala circulación de la sangre. Las venas se dilatan bajo el efecto del calor y están menos tonificadas, por lo tanto, menos eficaces par hacer que la sangre vuelva a remontar hacia el corazón.

La sangre se almacena y crea una inflamación, lo que ralentiza también el ritmo linfático y puede ocasionar la retención de líquidos. Las piernas, cuyos tejidos se ven inflados de líquidos, acusan los dolores.

piernas de mujerEl conjunto del proceso puede estar acentuado o provocado por las variaciones hormonales, en períodos de embarazo, de menopausia y en estado premenstrual. Pero, una mala circulación también puede ser hereditaria, y permanecer durante todo el año, incluso en invierno. Existen factores que agravan el fenómeno como la sobrecarga ponderal, los pies planos que disminuyen el retorno venoso y el sedentarismo.

Cuando hay dolor

Un dolor fuerte y acentuado puede ser el resultado de un edema linfático que refuerza la acumulación de la sangre: es un círculo vicioso y puede tener consecuencias graves en el sistema venoso, además de que puede provocar varices, edemas, y hasta úlcera en casos más graves.

Si por ejemplo, los pies son extremadamente dolorosos, hasta el punto de que os molesten a la hora de andar, se debe consultar a un flebólogo, para que os indique lo antes posible un tratamiento que se adapte bien a vuestro caso en particular.