Llega el calor, tus hijos ya empiezan a pedirte que les lleves a la playa y en el colegio, el final de curso cada vez está más cerca. Lo cierto es que tu trabajas hasta agosto y sabes que no puedes hacerte responsable de los crios hasta entonces, por ello, va siendo hora de que empieces a pensar dónde llevar a tus hijos este verano.
Muchos son los que optan dejarlos con los abuelos. Nuestros padres, que nos han visto crecer, son una alternativa segura. Con ellos aprenden valores que tu con tu poco tiempo a veces no puedes enseñar, así que la opción de dejarles con ellos, es muy razonable y positiva.
Otra alternativa, para aquellos que prefieran llevar a sus hijos a realizar actividades lúdicas, es llevarlos a un campus de verano. Los hay que se realizan dentro de la escuela dónde los niños estudian. Suelen ser económicos y al estar rodeados de niños conocidos, se sienten cómodos y satisfechos. Si en tu escuela no realizan este tipo de campus, pregunta a las madres de los campañeros de clase de tu hijo, seguro que muy cerca de ti hay uno.
También existen los campus de campamentos de verano que se encargan de llevar fuera durante unos días a los pequeños. Son una buena manera para que aprendan a ser más individuales y a valerse solos, además de afianzar la relación que tiene con sus compañeros. Este tipo de campus es ideal para que aprendan un poquito más sobre la autonomía y la relación con los demás.
También existen centros dónde además de todo lo anterior también se realizan clases con materias cursadas durante el año escolar. Este tipo de centros son ideales para aquellos que hayan suspendido alguna asignatura y se merezcan una reprimenda y no el ocio de un campus.
Como veis, las alternativas son dispares y excelentes, ahora sólo hace falta que decidas cuál de éstas es la ideal para tu hijo.
