No basta con poner el día en el calendario para elegir la fecha de la boda. La elección y sobretodo la disponibilidad del restaurante para el día de la boda son determinantes: es el momento de no perder el tiempo y lanzarse a la búsqueda de un lugar de ensueño para la celebración de las nupcias, y también en función de vuestro presupuesto.

La elección del restaurante para el banquete de bodas puede definir por sí misma la fecha de la boda. Normalmente los lugares para la recepción de los invitados se ven copados en algunas fechas del año (de mayo a agosto), y en algunos restaurantes, especialmente si se quiere celebrar la boda en Barcelona, la reserva se hace con dos años de antelación.

Pero, antes de precipitarse, más vale partir de una idea relativamente precisa en cuanto al número de invitados, y al presupuesto del que se dispone para la celebración. El precio puede variar de unos 300 euros a varios cientos de miles, puesto que hay para todos los gustos y todos los bolsillos.

Criterios de elección

Gastronómico, tradicional, romántico, de alta tradición culinaria, o cocina internacional, lo importante es elegir el restaurante ideal para organizar la recepción que tenéis en cabeza.

Mesa de banqueteExisten varios criterios a la hora de elegir el restaurante, siempre que se adapte a vuestros gustos y al estilo que queréis darle a todos los momentos de la celebración. Por lo tanto, nada debe dejarse a la improvisación para que ese día sea todo un éxito.

Puntos a tener en cuenta

El lado «práctico» es fundamental. Lo ideal es escoger un lugar para la ceremonia que no esté muy lejos del restaurante. En el caso contrario, conviene dar por adelantado a los invitados un plano del lugar. En la invitación de bodas se puede incluir esta información.

Debéis pensar también en las personas mayores, que tienen mayor dificultad para desplazarse. No olvidéis que es una boda para todo el mundo, y no sólo para gente joven.

Si optáis por un lugar al aire libre, no olvidéis que las condiciones meteorológicas son determinantes, y que deberéis pensar en alquilar una carpa para la recepción en el caso de que caiga algún que otro chaparrón (en primavera suele ocurrir).

Tampoco debéis olvidaros de organizar un guardarropa para los invitados… y pensar en algún espacio para los niños, especialmente si hay bebés. Lo ideal es que haya un sitio acondicionado para que los más pequeños puedan dormir en paz, que estén vigilados, y atendidos por algún adulto. De esta forma estaréis tranquilos durante la comida, y en la sobremesa posterior, que suele alargarse más de la cuenta.