Un falso rumor se mueve entre las rotativas de las revistas británicas, tras el fracaso de los Three Lions en el Mundial de Sudáfrica. El equipo inglés se tuvo que volver a casa tras ser eliminado en octavos de final. Un verdadero drama para un país que vive al 100 % la pasión por el fútbol.

Pero, por otra parte, la responsabilidad de la hecatombe sufrida por Francia no deja de apuntar hacia su entrenador, que tendrá que dejar al equipo en el mayor desamparo.

El reemplazo parece tener un nombre: David Beckham. Con 35 años de edad, el jugador y modelo publicitario no parece que volvería a jugar en la selección nacional. Tocado en el tendón de Aquiles, tuvo que seguir la debacle desde el banquillo. Pero, nadie le niega el carisma que ejerce sobre los jugadores.

Por eso mismo, no son pocas las voces que se oyen para catapultarlo como máximo entrenador de la selección inglesa, cosa que si es verdad le obligaría de inmediato a dejar el equipo en el que juega en la actualidad: el de L.A.

Un verdadero drama para Victoria y sus hijos, que tanto les gusta disfrutar del sol californiano, y estar lejos de la perenne niebla londinense. Por otra parte, la carrera de mujer de negocios de la ex-componente de las Spice Girls parecería estar ahora mismo en la cumbre, por lo que le resultaría muy complicado tener que desplazarse a tierras británicas.

¿Estaríamos hablando de una separación física de la pareja? Bien sabemos todos que el ritmo de vida de un seleccionador de fútbol es complicado, por lo que una lejanía, al menos temporal de los Beckham, se empieza a vislumbrar como una solución sin vuelta de hoja. Al menos que en el contrato con la selección inglesa si incluyera, como algunos apuntan, una cláusula de desplazamientos a L.A. en primera clase.