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La verdadera búsqueda de la felicidad nace de la actitud de querer estar en ese camino de superación. No observes tu modo de ser como algo estático, sino como un ánimo que puede cambiar. Y tú tienes mucho que decidir en lo que significa dar un giro a esta inercia.

Por ejemplo, puedes dar el paso de vivir menos ligada al lastre del pensamiento negativo, dejando atrás tantas quejas, para abrir la puerta de la alegría, la ilusión y el motor de la esperanza. Para ser una mujer positiva, en primer lugar, tienes que querer serlo.

Diario centrado en pensamientos positivos

Un ejercicio práctico es escribir un diario en el que únicamente anotes aquellas reflexiones posititas que son terapéuticas para ti. Un diario que es un ejercicio de coaching práctico para poner el punto de atención en el lado amable de la realidad.

Los detalles más sencillos son importantes en este punto porque la felicidad se compone de los aspectos más cotidianos.

Cómo ser una mujer positiva, alegre y feliz

Baños de bosque

Elige zonas verdes que te gusten y disfruta de paseos por estos lugares en los que puedes entrenar la conciencia plena de los cinco sentidos. Es decir, puedes observar la belleza cromática que te rodea, apreciar el aroma de los perfumes del campo, escuchar los sonidos de la naturaleza, sentir el tacto del suelo bajo tus pies… Intenta poner mente y corazón en armonía con el presente durante estos paseos que producen el efecto curativo de un baño de bosque.

Busca un trabajo que te guste

Si todavía no has encontrado ese trabajo que te apasione tanto como siempre habías imaginado, entonces, sigue buscando hasta, por lo menos, encontrar una oferta que se ajuste más a este plan de desarrollo profesional.

Pasas tanto tiempo en el trabajo que el plano profesional produce un impacto directo en tu nivel de felicidad. Sin embargo, que ese plan de encontrar un trabajo mejor no te aleje de la posibilidad real de disfrutar de tu proyecto presente.

Planes para vivir el presente

La verdadera fuente de la alegría siempre está en el presente, por tanto, para ser una mujer positiva, alegre y feliz es importante que disfrutes de planes que te permiten estar en este estado. Por ejemplo, escuchar música, leer libros, disfrutar del cine, asistir al teatro, caminar, conversar con amigos, hacer recados y gestiones cotidianas…

Busca la compañía de personas optimistas

Disfruta de la compañía de personas que con su presencia te animan a ser una mejor versión de ti misma. Personas que con su propia actitud de optimismo son un ejemplo de superación para ti. Disfruta de la amistad no solo a través del contacto tecnológico, sino también, presencial.

La amistad es uno de los principales alimentos del optimismo. Recuerda como explica Aristoteles que: «La amistad es un alma que habita en dos cuerpos; un corazón que habita en dos almas». Una bonita reflexión. Por tanto, pon en práctica tus habilidades sociales; empatía; honestidad; comunicación positiva. 

En la medida en la que eres más optimista, también eres más alegre porque los pensamientos influyen en tu estado de ánimo. Y cuando tienes más alegría también eres más feliz. 

Foto – Pixabay