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Ser empresaria es una labor que no resulta nada sencilla en la sociedad actual pero el espíritu emprendedor aporta fuerza a tantas mujeres valientes que hacen del obstáculo de la crisis económica un buen aliciente para desarrollar una iniciativa creativa.

¿Cuáles son los riesgos de ser empresaria?

Los seis riesgos de ser empresaria1. En primer lugar, las preocupaciones que se tienen como emprendedora son mayores que las que se tienen cuando eres trabajadora por cuenta ajena.

Pero conviene tener una perspectiva realista para entender que la satisfacción que se experimenta también es mayor.

2. La incertidumbre económica también es notable puesto que las emprendoras no tienen un sueldo fijo cada mes igual que al trabajar por cuenta ajena cuiando un día fijo de cada mes se recibe la cantidad marcada por parte de  la empresa. Especialmente, al inicio de la creación de un negocio, es cuando las dificultades crecen dentro de la aventura emprendedora.

3. Los autónomos tienen menos vacaciones y menos momentos de descanso. Pero la felicidad que surge de poder trabajar en aquello que te gusta es muy potente y eso lo compensa todo.

4. En algunos casos, puede que haya que trabajar en fines de semana o alargar las jornadas de trabajo en casa hasta tarde. Se trabaja mucho más siendo emprendedora. Conviene tener las cosas claras desde el principio porque no todo el mundo sirve para este camino que es vocacional.

5. Las empresarias tienen que asumir riesgos al abrir un negocio puesto que hacer una inversión no es fácil y conviene hacer balance antes de dar el paso.

6. Existen negocios que no sobreviven más allá de los cinco años y tienen que cerrar sus puertas. Sin embargo, siempre te quedará la satisfacción de saber que tú lo has intentado.

En la era de las tecnologías también puedes valorar la posibilidad de emprender online porque dar este paso es más sencillo.