Como auténticas fashionistas, nos interesamos por lo que se está llevando en esta temporada otoño-invierno. Las colecciones 2012/2013 anuncian por unanimidad un invierno de colores destacados. Pero, ¿cuáles son los colores para este invierno?

Para cada estación del año, la moda cambia, y las transiciones se realizan con mayor o menor suavidad. Este invierno se anuncia el fin del color block y de los tonos empolvados, para dejar sitio a los colores más naturales. Lejos de ser una temporada triste, los colores de este otoño-invierno son muchos más vivos y vintage al mismo tiempo.

La paleta de colores va del verde kaki al rojo bermellón, pasando por todas las tonalidades de naranja. Este invierno es el momento de recuperar el color que en años anteriores habíamos perdido de manera casi sistemática durante la estación del frío. El negro y el gris se van haciendo más discretos y las nuevas tendencias son más coloristas, lo que nos va a ayudar a pasar un invierno mucho más vitaminado.

Colores de modaNo se debe dudar a la hora de ponernos un abrigo oversize rojo, para que el invierno sea lo más trendy posible. Después de haber pasado la criba de todas las pasarelas del prêt-à-porter del invierno 2012, esta es nuestra selección de colores tendencia.

La tendencia del naranja

Esta tendencia debe verse en su sentido más amplio. El naranja chillón da un toque punchy a todos nuestros looks, pero este color puede dulcificarse, mutando hacia tonos más cobrizos, ámbar o azafrán, para aportar mayor suavidad a nuestro dressing.

Los colores tangerine están muy de moda. El naranja se lleva como look total, para maximizar su efecto, pero también se puede asociar al burdeos, para obtener un resultado mucho más trabajado.

La tendencia del rojo bermellón

El rojo es normalmente un color sexy y sensual. El tono bermellón tiene la capacidad de aportar a cualquier prenda de ropa un toque girly fascinante, incluso infantil. Punchy, e inesperado, este color permite modernizar los tonos invernales. El rojo bermellón siempre será percibido como un verdadero rayo de calor en medio de los días tristes, fríos y grises del invierno.