El coastering es una actividad que forma parte de las disciplinas de trekking. Se trata de diferentes carreras donde los participantes practican todo tipo de terrenos. El coastering está particularmente adaptado al entorno de la playa. La fuerza del agua y la maleabilidad de la arena son los instrumentos privilegiados de esta marcha dinámica. La práctica del coastering permite tener un cuerpo bien musculado una excelente salud.

Este deporte súper fácil, ofrece igualmente una sensación de bienestar. Se puede practicar en familia, entre amigas, o en solitario, y lo más corriente es que se practique en vacaciones. Por esta razón se encuentra en muchos centros de talasoterapia.

Entrando en materia

Para comenzar la sesión de coastering, conviene calzarse los baskets y caminar sobre la arena seca. Acelerad la cadencia y haced que el pie trabaje, partiendo de la punta hasta el talón. Gracias al aspecto maleable de la arena, se pueden tranquilamente calentar las articulaciones y los músculos sin dañarlos. Este ejercicio participa en la estimulación del sistema cardiovascular.

EjerciciosDespués de los calentamientos, se pasa a las cosas serias. Intentad modular el esfuerzo a base de pequeñas carreras de obstáculos: saltar un dique, caminar por un sendero, franquear riachuelos, escalar rocas… Estos ejercicios despiertan otros músculos, ayudan a reafirmar la silueta y hacen que el organismo se vuelva más dinámico.

Caminata y stretching para el final

Después del programa, se efectúa una caminata con los pies descalzaos entre la arena mojada y el mar. Primero se comienza por la arena dura con la punta de los pies: los músculos superficiales de las piernas (cuádriceps, pantorrillas, glúteos) se fortalecen. De vez en cuando, se mojan los pies hasta la altura de las pantorrillas para ayudar a aumentar el flujo sanguíneo, facilitando el drenaje del cuerpo.

Para terminar la sesión, se vuelve a la arena seca y se realiza algo de stretching. Sentadas, de pie, tumbadas, se comienzan series de estiramientos para vigorizar y dinamizar los músculos cansados. Los puntos de reflexología sobre las plantas de los pies también se ven solicitados, favoreciendo la fluidez del flujo energético corporal. Disfrutad pues de la brisa marina para llenar el organismo de oligoelementos y minerales.

Los beneficios de la marcha

En vuestro deseo de mantener el cuerpo y el espíritu en buenas condiciones, la marcha es una solución sencilla que no requiere una gran inversión. Sin embargo, para que esta actividad sea realmente eficaz, conviene realizarla con toda conciencia.

La marcha permite una circulación sanguínea fluida y armoniosa. También es un medio excelente para responder al control de la respiración y reforzar los músculos del cuerpo. 30 minutos de marcha al día, son suficientes para mantener sano el cuerpo y el espíritu.

Se puede prolongar la sesión hasta en una hora o una hora y media durante el fin de semana. Conviene llevar siempre un atuendo adecuado para salir a caminar. Y por supuesto, nunca conviene ir más allá de las propias capacidades físicas. Finalmente, la alimentación debe ser equilibrada en función de la energía que se quema a diario.