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Los mitos con relación a que cierto tipo de actividad física no ayuda a bajar de peso y otro estilo de entrenamiento como los ejercicios aeróbicos si son efectivos deben dejarse atrás y tener en cuenta ciertos patrones dependiendo de cada persona.

Existen sobre este tema cierto conceptos generales que en ocasiones son mal utilizados y el público en general los toma como ciertos como por ejemplo el mito que existe relacionado con la pérdida de grasa y tipos de ejercicios que deben practicarse.

recomendaciones-para-realizar-ejercicios-aerobicosEntre estas falsas creencias se afirma que los entrenamientos aeróbicos queman grasa en tanto que los anaeróbicos no lo hacen.

Sin embargo, cuando se plantea el hecho de practicar ejercicio físico para disminuir la grasa corporal siempre se habla de ejercicios aeróbicos que deben hacerse con una frecuencia de por lo menos tres veces por semana y con una duración de entre 30 y 45 minutos en cada sesión.

Si bien esta afirmación es verídica porque los ejercicios aeróbicos producen un gasto energético de grasas eficiente es necesario aclarar que aquellas personas que no se encuentran en buen estado físico pueden tener problemas de salud importantes con este tipo de prácticas. .

Según los expertos en el entrenamiento aeróbico se utilizan las grasas como fuente principal de energía mientras que en el entrenamiento anaeróbico, además de las grasas se utiliza como fuente energética específica los fosfagenos e hidratos de carbono.

Así una media hora de trote continuo a baja intensidad logrará que se utilice la fuente de energía de las grasas mientras que diez veces de cinco minutos de carrera con dos minutos de pausa a una intensidad alta el cuerpo utilizará la fuente energética de las grasas mas las fuentes anaeróbicas con un gasto calórico incluso mayor.

Los ejercicios anaeróbicos tienen un menor riesgo para personas con baja condición física o aquellas que padecen algún tipo de patología, mientras que los ejercicios aeróbicos forman parte de un tipo de entrenamiento más intenso y están diseñados para aquellas personas que tienen un nivel mayor en su condición física y no padecen de ningún tipo de enfermedad o patología que pueda resultar nociva para la salud.

La conclusión es entonces que los ejercicios aeróbicos pueden ayudar a bajar de peso pero los entrenamientos de baja intensidad también actúan sobre el metabolismo de las grasas y lípidos produciendo efectos beneficiosos a la hora de adelgazar y solo será necesario orientar el tipo de entrenamiento teniendo en cuenta las características físicas específicas de cada persona

Es recomendable entonces que un entrenador determine el método y el tipo de ejercicios ya sean aeróbicos o anaeróbicos que cada persona necesita y por lo tanto, no existe un solo método para «quemar» grasa con ejercicios sino diferentes opciones de acuerdo a cada individuo y el estado físico en que se encuentra.