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Todas sabemos de las bondades de la Dieta Mediterránea, creada haciendo referencia a todos aquellos alimentos que son comunes precisamente al área mediterránea, sobre todo aquellos que cultivan el olivo, como España, sur de Francia, Grecia, Italia y Malta, pero también la Dieta Mediterránea, depresión y fertilidad son temas que se vinculan a partir de estudios e investigaciones que los relacionan.

Entre los patrones considerados como comunes a la dieta Mediterránea se encuentran por ejemplo el aceite de oliva, como base fundamental y aporte de grasas, sumándose un alto consumo de cereales tales como el trigo, además de legumbres, frutas, vegetales y frutos secos, sin olvidar una ingesta moderada de pescado, carne de ave, lácteos y vino, evitando en lo posible la carne roja.

Dieta Mediterránea, depresión  y fertilidadA través de los años, la Dieta Mediterránea ha ganado muchas variantes pero siempre manteniendo sus principios que ayudan a prevenir por ejemplo, enfermedades coronarias y ayudar a bajar de peso de forma saludable.

Un papel fundamental cumplen entonces,  los cereales, legumbres, hortalizas, frutas o pescado, además de la utilización de aceite de oliva virgen.

La Universidad de Navarra hace unos años realizó un estudio cuyos resultados señalan que la dieta mediterránea reduce hasta en un 50% el riesgo de depresión. Una investigación realizada con una muestra de diez mil personas que fueron monitoreadas durante cuatro años, llegando a concluir que la Dieta Mediterránea ayuda a disminuir el riesgo de padecer de depresión.

El estudio reveló que los problemas cardiovasculares se relacionan con los trastornos de tipo depresivos encontrándose durante el seguimiento algunas relaciones directas como el hecho que el aceite de oliva, a través de sus grasas monoinsaturadas y sus compuestos fenólicos, mejora ostensiblemente el funcionamiento de la serotonina, sumado a que los ácidos grasos Omega 3 que posee el pescado cumplen un papel importante en el funcionamiento óptimo del sistema nervioso central.

Asimismo, el ácido fólico y las vitaminas B12 y B6 ayudan en la síntesis de neurotransmisores y algunas sustancias que se relacionan de forma directa con el sistema nervioso central.

Con relación a la fertilidad en las mujeres un estudio de la Universidad de Navarra llegó a la conclusión que seguir la dieta mediterránea disminuye hasta en un 44% los problemas de la mujer para quedarse embarazada.

Elaborado por el Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública y el Instituto Cultura y Sociedad de la Universidad de Navarra, coordinados por Jokin de Irala, catedrático de Medicina Preventiva de la universidad, el estudio se realizó con la colaboración de dos mil mujeres de entre 20 y 45 años, que durante 6 años y medio siguieron dietas controladas con diferentes perfiles.

Una dieta se caracterizaba por su alto consumo de carnes rojas, comida rápida, lácteos enteros, repostería industrial, patatas, huevos, cereales refinados, salsas, comidas procesadas y refrescos azucarados.

En tanto que otra dieta seguía un patrón cercano a la Dieta Mediterránea, donde se destacaba un alto consumo de hortalizas, frutas, pescados, carne de ave en lugar de algunas carnes rojas y con el uso habitual del aceite de oliva e incluyendo una mayor ingesta de lácteos bajos en grasas.

Los investigadores pudieron constatar que las mujeres que seguían la Dieta Mediterránea habían acudido a los especialistas por problemas para quedarse embarazas un 44% menos de veces.